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El motor para portones eléctricos es uno de los dispositivos más útiles del mundo moderno ya que permite optimizar los tiempos de entrada y salida de personal y mercancía dentro de un edificio mientras resulta una opción bastante cómoda a todas aquellas personas que desean acceder rápidamente al complejo. Una vez que es instalado, los residentes, trabajadores o usted como dueño de la instalación rara vez le prestan atención hasta que comienzan los problemas y es cuando se preguntan si requieren de un reemplazo.

El primer factor es el ruido, cuando comienza a rechinar o emitir sonidos desagradables se pregunta si el motor para portón eléctrico está llegando al final de su vida útil, luego comenzará a notar que deja de trabajar eficientemente, se ralentiza o no cierra apropiadamente; no obstante, si ya ha leído nuestro artículo acerca del mantenimiento de las puertas automáticas, sabrá que esos problemas se pueden solucionar si realiza las acciones preventivas y correctivas apropiadas por lo que conocer cuándo debe reemplazar el mecanismo es una tarea más complicada.

Es por eso por lo comentaremos cuándo debe reemplazar los motores portones eléctricos puesto que su mecanismo habrá llegado al final de su vida útil; o si simplemente requiere un mantenimiento.

¿Cuándo es el momento de reemplazar una puerta automática?

Si bien los problemas comúnmente se solucionan con una simple reparación, existen inconvenientes graves que requieren de un reemplazo. Lo primero que hay que comprender es el mecanismo de la puerta automática; existe un motor que se encarga de movilizar el sistema (sea batiente o de corredera), uno o varios rieles, sensores y controles; es importante identificar las piezas que se dañan, de forma que tenga la posibilidad de sólo reemplazarla y no tener la necesidad de cambiar todo.

A continuación, le mostraremos los escenarios en donde obligatoriamente deberá reemplazar todo el sistema.

Daños en el portón

Si la puerta se raya severamente debido a accidentes será momento de reemplazar el portón ya que estos arañazos van a conseguir que se comience a oxidar en su interior, ya que hará que sea endeble y las probabilidades de romperse se incrementarán considerablemente. Pero todo dependerá de la profundidad de las aberturas, entre más pequeñas, menor el riesgo. Por otro lado, en cuestiones de estética también es conveniente reemplazarlo.

Abolladuras

Las abolladuras son un indicativo directo de que es necesario reemplazar el portón, ya que ocasiona daños en el resto de los componentes del sistema; y es que así no note que se está alterando el motor para portones eléctricos, paulatinamente verá que no cerrará completamente o que el tiempo en el que se mueve es más lento; esto es debido a que se genera un desequilibrio en los rieles que conlleva a la fricción y fuerza a que el mecanismo trabaje el doble.

En dado caso de que un vehículo abolle el portón muy fuerte recomendamos mantenerla cerrada hasta el momento en el que un técnico la revise y reemplace ya que de lo contrario el motor empezará a dañarse y generar roturas de resortes.

Deterioro

Toda puerta tiene un tiempo de vida determinado y que podrá afectarse debido a diferentes circunstancias como la presencia de un clima muy húmedo o inundaciones que provoca óxido o un golpe provocado por ventarrones, los cuales deterioran el portón y hacen que el motor se esfuerce el doble.

¿Cuándo sólo se requiere una reparación?

Algunos procedimientos no requieren de un reemplazo y basta con un simple procedimiento de reparación y mantenimiento, por ejemplo:

Problema con los transmisores

Los transmisores son una parte fundamental de la puerta automática ya que son los encargados de recibir la señal y permitir o impedir la apertura del portón; asegúrese de que las baterías tienen la energía suficiente y en dado caso reemplácese cuando estén llegando al final de su vida útil.

Los sensores no responden

Los modelos más importantes del motor para portones eléctricos incluyen sensores que impiden el aplastamiento de las personas o coches que pasan por el interior mientras está cerrándose; si esto no sucede y la puerta no se detiene bajo ningún estímulo quiere decir que hay un problema con el sensor; en algunos casos es que no funcionan y en otros que simplemente están sucios y no logran detectar apropiadamente la presencia de un objeto.

Riel o puerta desalineada

Con el paso del tiempo los rieles o portones van a desalinearse lo que hará que se genere el típico chillido que indica un roce anormal; para solucionarlo debe desmontar la estructura y devolverla a su lugar inicial, de forma que el portón trabaje suavemente y sin ningún ruido molesto.

Sin importar nada, recuerde que cuenta con el asesoramiento de RW Automatización, nosotros nos encargaremos de recomendarle el mejor motor para portones eléctricos sí debe reemplazarlo o indicarle el mantenimiento que hay que realizar en caso de que la falla no sea tan grave; llámenos al +56 2 2820 2300 o escribanos al correo ventas@rwautomatizacion.cl para más información.